“No sirve que nos regalen flores, si sufrimos de una sociedad patriarcal”










DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER



Más de 50 mujeres que participaron de un Cabildo Abierto . Momarandu habló con ellas y siguió el encuentro

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El evento fue organizado por el Movimiento Barrios Unidos con el fin de tratar las problemáticas más urgentes de la mujer

“No sirve de nada que regalen flores, si vamos a seguir sufriendo las consecuencias de una sociedad patriarcal”, remarcó la abogada especialista Marcela Caballero, representante del INADI Corrientes. Se refirió a los regalos típicos que se hacen para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, pero dijo que no hay que olvidar el trasfondo de lucha y cambio social que hay detrás de la fecha.

“Me pone contenta que agasajen a las mujeres, pero no nos podemos olvidar justo en este día de las desigualdades escondidas y visibles de la que somos víctimas aún las mujeres”, continuó Caballero.

Ella fue una de las invitadas al Cabildo Abierto de Mujeres, junto con Hugo Midón, delegado del INADI, la periodista Mónica Colunga, Marisa Sanauria de la Comisión de Derechos Humanos y de Judith Castro, trabajadora social y familiar de un desaparecido en la última dictadura militar.

Este fue el segundo año consecutivo que el Movimiento Barrios Unidos organiza el cabildo para informar, concientizar y poner en común sobre las distintas problemáticas que afectan a las mujeres como el fortalecimiento de sus derechos, la despenalización del aborto, violencia de género y trata de personas.

“Nuestro principal objetivo es que lo que exponemos acá se replique también en los barrios”, explicó Soledad Ros, del Movimiento Barrios Unidos . La agrupación a su vez, piensa reintegrarse al programa nacional Juana Azurduy de fortalecimiento y participación de mujeres con esa misma meta.

El cabildo se realizó en el salón de la Asociación de Periodistas, dónde más de 50 mujeres de todas las edades, desde niñas, adolescentes y adultas, que viven en barrios correntinos escucharon atentas e intercambiaron testimonios. Aunque con escasos 5 representantes, hay que destacar que también algunos varones se vieron interesados en las temáticas.

Judith Castro reforzó lo dicho por Ros de que estos temas deben motivo de charla y reflexión todos los días, durante el desayuno y las reuniones con familiares y vecinas.

Las mismas participantes durante la ronda fueron visibilizando los estereotipos más arraigados en los barrios: el de madre, esposa y “vecina chismosa”, a la vez que veían el compromiso y la solidaridad como forma de quebrar esos prejuicios.

Fue el turno de la periodista Mónica Colunga quién reforzó el concepto de estereotipos conceptuando la violencia mediática o simbólica. El discurso mediático nos dice cual es “la forma correcta de desear”, explica Colunga, y refuerza estereotipos de comportamiento y belleza que termina por “desintegrar nuestra autoestima”.

La forma irónica, elocuente y clara con la que habló Colunga tuvo mucha llegada entre las jóvenes que pusieron todo su interés en la explicación, pero también en las mayores que, aunque un poco sonrojadas, asentían ante la explicación fálica del poder en el sistema patriarcal. “Nos quieren hacer creer que porque no tenemos ‘el palito’ no tenemos poder”, concluyó Colunga.

Hugo Midón continuó la línea de Colunga, al hablar de la construcción social, cultural y simbólica que históricamente se ha hecho tanto del varón como de la mujer. Tomando casos legales puntuales dijo que existe “una pertenencia de las mujeres a un sistema de valores que es una locura”.

Para Midón, la solución para contrarrestar las justificaciones y excusas machistas que yacen incluso en la Justicia es “reconstruyendo esos valores actuales y volver a construir nuevos”.

Sin duda, empoderamiento fue la palabra que englobó la postura del Cabildo. “Esto es fundamental, porque al ser algo social, lo padecemos profundamente en los barrios”, comentó Ros.

El empoderamiento se logra a través del conocimiento y la concientización, por eso Ros ve como necesario acercar a los barrios los temas más urgentes como educación sexual, adopción y manejo de la ley 26.485 de protección integral de las mujeres, y los fundamentos para despenalizar el aborto.

“Como explicamos acá, despenalizar el aborto no es estar a favor de ello, sino quitar la culpabilidad social, legal y moral que cae sobre la mujer por decidir sobre su cuerpo”, declaró Ros. Además agregó que ese es uno de los ejes más complejos y que más se debe trabajar.

“Hacer valer nuestros derechos es romper con las distintas formas de violencia de las cuales las mujeres hemos sido objeto a lo largo de la historia. La Patria también es nuestra”. Así, estas mujeres plasmaron el empoderamiento de su espacio en afiches, con sus palabras.


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