Con un impresionante despliegue policial se desarrolló la pacífica marcha por el Boleto Educativo Gratuito, organizada por el centro de estudiantes “Hector ‘Pata’ Acosta”. La policía mantuvo en todo momento una actitud desafiante y, realizó un operativo desproporcionado, dado que la lluvia hizo menguar naturalmente la participación de los jóvenes. Los uniformados hicieron un cordón a lo largo de toda la cuadra de la municipalidad, y se dedicaron a desactivar descaradamente la convocatoria, impidiendo que los alumnos que salían de las escuelas se acercaran a la manifestación, mediante amenazas de detención y “aprietes” para los que ellos están preparados. El operativo habría sido pergeñado y dirigido por el ex agente del destacamento
123 y secretario
privado
del intendente Vischi, Omar De Miranda, quien apostó estratégicamente a
tres empleados municipales para fotografiar, intimidatoriamente, a los
jóvenes que marcharon y luego huyó cobardemente hacia la policía, como
se hacía antes. Uno de los “fotógrafos” era el propio secretario del
presidente del Concejo deliberante Julio Cazarré (foto).La marcha había salido desde la plaza San Martín, bajo una lluvia torrencial, los manifestantes caminaron por la calle Colón, ante el aplauso de los comerciantes y los bocinazos de apoyo de los automovilistas que debían detenerse al encontrarse con la nutrida columna, dado que el binomio Vischi-De Miranda ordenó que no se cortara el tránsito en el ánimo de crear descontento en los vecinos, por un reclamo más que justo por el boleto estudiantil.
Habiendo llegado la manifestación a las puertas del palacio municipal, toda la organización del operativo organizado por el ex agente de la represión, se centró en desalojar “amablemente” a la mayor cantidad de jóvenes posible e impedir el acceso del lugar de los alumnos de las escuelas secundarias que a esa hora comenzaban a salir de los distintos establecimientos, para ello, los agentes policiales se acercaban a los manifestantes menores de edad para amedrentarlos.
Un chico de 15 años se acercó a este cronista y relató lo sucedido “se me acercó un policía y me dijo, ‘andate porque va a haber quilombo, tenemos órdenes de reprimir’, y no solo eso, -agregó-, me llamó mi hermana, que venía de la Normal a apoyar la protesta, y me contó que un policía la empujó en la esquina del Banco y le dijo que no podía pasar, y cuando ella le respondió que tenía derecho a ir a la plaza el policía, con la mano en la pistola le respondió ‘desaparecé porque te llevo a la comisaría por desacato’, aseguró el joven, a quien se lo notaba visiblemente asustado”.
El petitorio fue recibido por el secretario de Gobierno y el presidente del Concejo, quien minutos antes había increpado duramente a la concejal Sara Alegre, en el pasillo de ese cuerpo deliberativo, por haber apoyado el reclamo juvenil.
Es destacable la participación de los estudiantes y de las agrupaciones militantes en el reclamo por el boleto, marchando con orgullo y alegría debajo de una lluvia torrencial, poniendo la cara frente a las cámaras de fotos de los alcahuetes de De Miranda y resistiendo a las presiones policiales, que en todo momento “trabajaron” fuertemente para desactivar la marcha.
También debe rescatarse el apoyo de las agrupaciones sindicales, Soem, ATE y el Sindicato de Camioneros, en la representación de sus secretarios generales y diversos afiliados.
También fueron de la partida militantes
de La Cámpora, Movimiento Evita, Barrios Unidos, Miles y el Partido
Comunista, asi como diversos dirigentes del FpV, entre quienes se divisó
a Lilian Jara, Rosa Baez, Miguel Arias, Anahí Limstron y Laly Giorgio;
docentes como Catalino Carbonell, Alejandra Mumbach, Ricardo Vassel; y
los concejales, Alegre, Yardín, Baez y Rodríguez.
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