Ante el reclamo de los vecinos junto a Barrios Unidos
Aguas de Corrientes reconecto el servicio.
El inconveniente provoco problemas de salud a niños.
Durante la mañana del pasado martes 10 de enero , trabajadores del INVICO - Instituto de Corrientes - que se encuentran trabajando en una obra de construccion de viviendas ; cortaron un caño maestro , que abastecia de agua potable al asentamiento Las Casillas ubicado frente a los Barrios Laguna Seca y Paloma de la Paz.
El asentamiento que tiene mas de dos años , esta constituido por mas de 100 familias con en su mayoria , tiene entre 2 y 5 hijos de edades que van entre meses y diez años , ademas de adultos de 60 y 70 años ; por lo que la situasión era realmente critica ante el agobiando calor y habia provocado problemas de desidratación a varios menores.
Ante el reclamo de los vecinos junto al Movimiento BARRIOS UNIDOS , se hizo presente en el lugar el Derente de la Empresa Aguas de Corrientes en la mañana de este miercoles 11 y se comprometio al resolver el problema . En el transcurso de la mañana operarios de la Empresa resolvieron el inconveniente y los vecinos volvieron a contar con el servicio.
El Gerente de Aguas de Corrientes Pablo Langun , junto a Ana Salazar - de Barrios Unidos - y Faviana Zalaba - responsable del Comedor del Asentamiento - acordaron un trabajo en conjunto para regularizar la situasión de los vecinos y mejorar el servicio.
LA HISTORIA DEL ASENTAMIENTO Y DE LA LUCHA POR EL DERECHO A UNA VIVIENDA DIGNA.
A dos años del establecimiento del asentamiento “Las Casillas”, en la Capital correntina, más de cien familias construyeron sus viviendas en terrenos ocupados y reclaman poder regularizar su situación y la urbanización del mismo. Los primeros días del mes de diciembre del 2009, una enorme inundación provocada por grandes lluvias abarcó distintos barrios de la Capital correntina. Es así que familias enteras de los Barrios la Olla, Loma Linda, Caracolero y Ongay decidieron ocupar un terreno privado de dos manzanas ubicados en el vértice de las Avenidas Tacuarí y Cartagena, entre las calles Francia y Calle 186.
El predio, de propiedad privada, se encuentra frente a los barrios Laguna Seca y Paloma de la Paz, lugar que hace años estaba totalmente abandonado. Las familias, cansadas del hacinamiento, las inundaciones y las promesas, construyeron de manera precaria sus casillas -de allí su nombre- y se ubicaron en el lugar, dispuestos a pelear por un pedazo de terreno.
A pesar de la actuación policial y los intentos de desalojo, las familias resistieron y se fueron consolidando como una nueva comunidad hasta constituirse en un barrio actualmente. De hecho, fue uno de los pocos asentamientos de los últimos años que prosperó aunque en la mayoría de los casos fueron desalojados incluso de manera violenta.
Hoy, a un año, se pueden ver distintas construcciones de materiales y también casillas de madera y chapa de cartón y los mismos vecinos se organizaron para realizar extensiones precarias de las redes de agua y luz eléctrica.
Fabiana Zabala -de 24 años, madre soltera de dos niñas, educadora popular y dirigente del Movimiento Barrios Unidos- recuerda que “fuimos llegando de distintos barrios cercanos ante una gran inundación y cansados de vivir en muy malas condiciones, no teníamos otra alternativa que pelear por vivir dignamente, lo hicimos fundamentalmente por nuestros chicos y hemos logrado mejorar nuestra calidad de vida a pesar de muchas necesidades”.
“Los vecinos se organizaron, se parceló en terrenos de 10 por 10 metros y solidariamente entre todos se extendió la red de agua y de energía eléctrica para contar con los servicios básicos. En una palabra luchamos por nuestro derecho a una vivienda digna”, continuó Fabiana.
“También con la ayuda del Movimiento Barrios Unidos pusimos una copa de leche en mi casa que funciona los días domingo a la mañana y a la que asisten mas de 50 chicos. Estamos solicitando al Estado poder regularizar nuestra situación y pagar cuotas accesibles, ya que somos familias humildes y además que se urbanice el asentamiento y poder contar con los servicios básicos para poder vivir dignamente” concluyó la joven dirigente social.
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